La educación mi estimado despistado que lees este blog, según mi abuelita manuela (quien a pesar de no haber llegado más que a la primaria, era una sabia), no se aprende, sino se mama, esto lo saco a colasión porque verdaderamente ya estoy hasta la madre de gente carente de lo anterior, y a la que, para mi desgracia cada que voy al cine me encuentro, asì, fácilmente puedo identificar a aquellos que se ponen a platicar, otros patean el asiento de delante, y que decir de aquellos que suben las patas en los asientos de enfrente, incluso ante los ojos complacientes de padres, tíos, novios, etcétera, ante estos ejemplos my friends no me queda otra opción más que pensar en como la sociedad se ha ido degenerando al grado de perder valores tan elementales tales como el respeto hacia los demás, y esto es solo por citar un pequeño ejemplo, digo, si quieren platicar porque jijos de la chingada no se largan a un café, a sanborns por ejemplo, ahora, que si en su terruño no los hay, pues larguense a platicar al parque, a las chalupas, a donde vendan tamales, pero porque en el cine?, bueno, ni el rudo y el cursi pudieron acabar con estas prácticas tan desagradables, así es que, si tú eres una de esas personas que se la pasan haciendo este tipo de actos, desde aquí te mando directito y sin escalas a chingar a tu... perdón, mejor te pido que encamines tus pasos hacia donde se encuentre la autora de tus días y ya estando ante su precencia te dediques fervientemente a inoportunarla (de esta forma no se me tachará de pelado jejeje), de verdad, solo les pido: RESPETEN A LOS QUE SÌ QUEREMOS VER Y ESCUCHARA LA PELÍCULA, BOLA DE OETES.
Hace falta que a la entrada repartan un méndigo instructivo de COMO VER AL CINE SIN MOLESTAR AL PROJIMO! totalmente de acuerdo contigo, hay cada impertinente e inepto en las salsas de cine...
ResponderEliminary en la fila del banco y en el restaurante y manejando un coche carísiimo...